¿Se pondrán de acuerdo Hipólito y Miguel? 

Hipolito Mejia y Miguel Vargas m.

Si para que se resuelva la crisis del opositor Partido Revolucionario Dominicano (PRD) tienen que ponerse de acuerdo el presidente de la organización Miguel Vargas Maldonado y el ex presidente Hipólito Mejía, hay que descartar de plano que eso pueda ocurrir.

Y si eventualmente se diera esa remota posibilidad, pues a Vargas Maldonado tendrán que ponerle otro interlocutor, que no sea Hipólito, y deben mantenerle a éste bastane distanciado, a juzgar por las declaraciones que ofreciera el primero a propósito de versiones que han corrido dando cuenta de probabilidades de acuerdo entre las partes.

Dentro de las versiones que se han puesto a circular se encuentra la de que la hija de Mejía, Carolina, pudiera ir postulada a la vicepresidencia de la República como compañera de boleta de Miguel, quien sería el candidato presidencial, fórmula que supuestamente aceptaría y vería con buenos ojos el papá.

En todo este proceso, Vargas Maldonado ha sido insistente en aclarar que no hay nada de acuerdo, y ésto su equipo de prensa lo ha hecho saber inmediatamente después de las dos reuniones que ha sostenido con Hipólito, primero en la casa de José Miguel Soto Jiménez, y luego en la del doctor José Joaquín Puello.

El presidente del PRD parece estar en una posición de resistencia a pactar con Hipólito, mientras que éste se observa muy dispuesto a llegar al acuerdo que sea para solucionar la problemática del partido. Y Miguel ha sido persistente en manifestar que las expulsiones y sanciones que ha aplicado el Comité Disciplinario de la organización (que incluyen a Mejía) son invariables y no se negocian para posibles acuerdos, argumentando además que no se haría nada que esté al margen de lo institucional.

La situación se torna más cerrada desde los litorales de Vargas Maldonado al ofrecer sus declaraciones señalando que "Cuando usted tiene un enemigo fuera y lo deja entrar a su casa, Usted tiene que tener toda la vigilancia necesaria", además de precisar que "Tengo que hacer y recordar aquella frase de Juan Bosch "el que me engaña una vez, sinvergüenza es, si me engaña dos, sinvergüenza yo".

O sea, que, públicamente, ante el país político dominicano, Miguel ha reconocido a Hipólito como un enemigo, aunque aclaró que no tiene enemigos; y, en segundo lugar, hemos de interpretar que entiende que Mejía lo engañó, y está negado a que lo vuelva a engañar, dejando establecido, en el contexto de su declaración, que considera a éste un "sinvergüenza".

Suponemos que para Hipólito, el hecho de que Vargas Maldonado llegara a esos extremos en sus declaraaciones, probablemente le resulte inaceptable, y considere que sería mejor buscar otra vía para lograr lo que persigue a lo interno del PRD.

El tranque en ese partido se mantendrá y no hay señales en el horizonte que indiquen que las cosas se puedan reorientar... Sigue la crisis.